Palabras abortadas desde el mismo seno donde te concibieron no te estrecharon mis labios y en un suspiro se destejieron por timidez, tal vez. Por no tener motivo o, tal vez…, porque eran muchas y el camino muy estrecho, se desbordaron quedando yertas… Desoladas, plurales, en un singular destino. Donde los oídos prestos, sólo escucharon el silencio de tu fin sin regreso.
Fabio Pimpi Borquez - Autor inedito nacido en El Calafate